La lista de los diez nombres más frecuentes solo presenta un leve cambio de orden respecto al año anterior en el caso del nombre de María Dolores, que asciende un puesto en detrimento de Dolores. Los que sí presentan cambios son los valores, manteniéndose la tendencia de pérdida de población y envejecimiento de las personas que usan estos nombres. Solamente David parece ajeno a este comportamiento siendo el único nombre de este ranking que aumenta en población.
Otra de las características de esta publicación es que también permite conocer la distribución de un nombre o un apellido entre los distintos grupos de edad. Por ejemplo, si se analiza el nombre de Manuel, se puede observar que, aunque mayoritariamente es usado por personas nacidas entre los años 40 y 50, su uso se está recuperando en las nuevas generaciones, presentando un repunte para los menores de 18 años de edad.
Por otro lado, si se plantea un ranking de nombres según la edad media de sus poseedores, se observa que entre las diez posiciones más longevas aparecen algunos nombres de origen anglosajón, sobre todo en el caso de los hombres, lo que responde en gran medida a la presencia de personas jubiladas de origen europeo que residen en Andalucía. Junto a estos nombres aparecen, también con una elevada edad media, nombres tradicionales españoles cuyo uso en la actualidad es menos frecuente.
En el otro extremo, entre los diez nombres con menor edad media se observa la presencia de nombres de origen extranjero pero en su versión castellanizada y preferentemente nombres no compuestos y cortos.